sábado, 29 de noviembre de 2014

QUERIDO AMIGO CHESPIRITO

Querido amigo, esta historia comenzó en Ica, ciudad del Perú, donde en los años setenta frente a mi televisor en blanco y negro, mueble de madera y perillas, conocí   por primera vez a Roberto Gómez Bolaños; como todas las tardes, después del lonche, esperaba  para escuchar la musiquita que daba inicio a la serie el “Chavo de Ocho” , tu tu tu tu tu tu tu tu tu turuturutututututu…….. Miraba los títeres animados moviéndose frente a mi, como antesala a las sorpresas y diversión de cada capitulo; que tardes de diversión nos brindaste querido Chespirito a mi y mis hermanas, los diarios capítulos hacían que mis tareas escolares se posterguen para más tarde aunque tuviéramos  examen.

Como extraño aquellas tardes que pido a Dios volver ha tener el  alma e inocencia de aquel niño, aunque lejos por la distancia de tu vecindad en México, con tristeza me preguntaba todas las tardes al verte en  cada capitulo: ¿Chavo, como puedes dormir en un barril?;   como te podías resistir ante una torta de jamón cuando te preguntaba Quico  ¿Chavo, quieres una torta de jamón?, ¡Sí! ¡Compra!, respondiéndole tristemente ¡al cabo que ni quería!; o Don Ramón te decía ¿Chavo, no puedes aguantarte el hambre por ocho minutitos?, y tu  respondías que Llevabas ocho años aguantándotela,  ahora ya de grande me pregunto ¿es que el mundo no es capaz de darle a un niño un mejor lugar para vivir?; a pesar de la pobreza, el odio y el rencor del mundo, querido amigo  tu,  me enseñaste a sonreír.
 

Viejo amigo con alma de niño, tu alegría me explico que todo anda bien con un zas, zas ,zas, me enseñaste a que con inocencia todo se conquista, que con un  Sale y vale puedes arriesgarte  a conquistar tus deseos, también a prendí que no importa ser ¡probre! , pero si importa ser honrado;  si este mundo tuviera un poquito de tu humildad, solidaridad y honradez, escucharíamos menos pi.. pi.. pi… en los niños de hoy.
                                                        
Pequeño niño travieso, ni tus torpezas, ni chispoteadas, me impidieron ahora que ya soy un hombre que  olvide, que la gente buena debe amar a sus enemigos y que a pesar de las dificultades y problemas del mundo de hoy,  aunque existe gente que me hace mucho daño, me enseñaste a no responderles, por que me quedo grabado lo que tu  decías en la vecindad  que la venganza nunca es buena por que mata el alma y la envenena.


También hice muchas travesuras con mi mejor amigo Julio así como tu las hacías con Quico, siempre  escuchando  las recriminaciones de mis padres ¡tenias que ser Carlos, pareces el chavo!, reclamándome y corrigiéndome diariamente ahora gracias a ellos aprendí  ha reconocer mis errores asumiendo sus  consecuencias con los coscorrones que me da la vida,   reconociendo  las faltas con un ¡fue sin querer queriendo!, pero siempre tratando de mejorar cada día, el mundo aun no me tiene paciencia, pero gracias a ti Chespirito busco la paz en todos los  días de mi vida   y la armonía con Dios  que me permitan  ser una mejor persona.

Me puedo imaginar hasta ahora, cuando movías tus pies, con los  zapatos que la Chilindrina te regalo el primer día que llegaste a la vecindad  diciendo: ¡Eso, eso, eso! Me demostraste toda tu felicidad con un ¡Si!  te motivabas para hacer algo o ¡juegar! con tus amigos, de igual manera yo crecí  con los juegos y la diversión de tus programas,  poco a poco  fui creciendo junto a mis hermanas, pasaron los años,  hoy en día  intento darme fuerzas en  cada problema que me pone la vida con un  ¡Eso, Eso, Eso…¡ tengo la esperanza que las cosas malas pasen y que el mundo  mejorara. 

Ahora que te vuelvo a ver recuerdo mucho parecerme a ti, siempre con las manos sucias, evitando mientras pueda que me mojen o ir a la ducha, siempre jugando con tierra,  con toda clase de churruminos y  ensuciando por todas partes; te cuento  también que  vendí aguas frescas es un cajón de madera que me presto mi mejor amigo, junto a mi hermana Mariela  nos  robábamos  el azúcar de  casa para preparar el agua de cebada y venderla, fue nuestro primer negocio, estábamos felices, vendíamos muchos vasos en un taller  cerca de mi vecindad, pero pronto se acabo la ilusión cuando mama nos clausuro el negocio diciéndonos que nosotros no necesitábamos vender, por que nosotros no éramos pobres como el chavo, se molesto mucho y ahora pienso que nos hizo un poco de desventaja, por que uno no debe de tener vergüenza de vender y ganarse la plata trabajando como uno pueda; Viejo amigo con  pantalón de  tirantes me acompañaste tantos años, tu no crecías y yo  si, tu alegría perduraba diariamente mientras yo me volvía mas serio y triste con los días.
                                                       
Los años pasaron y estudie tanto para no ser un cerebruto, pero también me di cuenta que estrenar el cerebro y llegar temprano a su repartición no era tan importante  si es que no cultivaba los valores de la honradez y solidaridad con el mundo y que el único responsable de lo que suceda en la vida es el hijo de mi padre y mi madre que no es mi hermano.

De niño nunca tuve chiripiorcas y aspavientos, ahora de hombre los tengo y vienen apareciendo, las dificultades, los miedos y el estrés del mundo de hoy, los días  me piden a gritos que necesito un baldazo de  agua, para dejar los problemas de lado y volver hacer el niño travieso con las manos sucias que siempre fui.

Siempre soñé al igual que tu en ser futbolista, me encantaba el futbol y vivía para jugarlo en mi vecindad y aunque no le iba ni al América ni al Chivas ni  tampoco grite   “Goooooooool de Borjaaaaaa!!", sin embargo vibre al verte en el Chanfle y me enternecías  en la vecindad cuando jugabas con la pelota de Quico pateando siempre a la portería de  la puerta de tu vecindad, me provocaba mucho jugar después de los programas , siempre lo hice pero gritando Goooooool de Cubillaaaaas!!.,

¡Pus pus pus! ahora ya los tiempo pasaron he crecido, la vida no es fácil, siempre espero que no me toque el ocho o que alguien me descalabre los cachetes,  siempre  preguntándome  ¿Y yo qué dije? ¿Y cómo es? ¿Y yo qué dije? mil veces, por que este mundo es difícil, pero con tu bondad nos enseñaste a verlo mas simple.

Yo ahora soy militar, volé aviones también me case, tuve dos hijos se llaman Sebas y Salva,  yo nunca supe más de ti desde que te despediste de tus amigos en Acapulco, ahora me pregunto si  dejaste de ser probre o si también te casaste, quizás sea mejor así recordarte frescamente como aquel niño que todos debemos conservar por eso te fuiste sin avisarnos pero siempre te recordaremos así pasen 40 años mas si hubieras crecido como yo tal vez hubiera sido diferente. 
  
 ahora Te cuento amigo, recordando tus frases, que siempre que estamos en la cocina de mi casa, donde generalmente  tengo mucho hambre, le digo a mi esposa ¿si tiene galletas? y ella me responde riéndose ¡Que no hay galletas…!, nos reímos mucho juntos  recordándote, luego yo le digo –felizmente  no tenemos en la casa ¡….otro gaatoo!., y en el cine cuando toda la familia  vemos una película mala, les digo repetidas veces, que mejor hubiéramos ido a ver el Chanfle, mis hijos no lo entienden, pero mi esposa sonríe, siempre recordamos tus bromas, realmente la pasamos bien; ahora veo los animes con mi hijo Salvador  me divierto viéndote nuevamente y recordando tus manos sucias viendo las de mi hijo mugre preguntándole ¿que tienes en las manos, están limpias? Y el me dice  -me las he lavado ayer. 

 El Chavo y toda  la vecindad (Doña florinda, Kiko, Chilindrina, Don Ramón, Doña Clotilde, el Profesor Jirafales, El Sr. Barriga, Jaimito y Godínez), me divirtieron, me acompañaron, me enternecieron, me alegraron y en algunos capítulos hasta llore, gracias a todos por su  trabajo y talento, crecí  con ustedes desde el primer día hasta el ultimo capitulo, viéndolos en aquel viejo televisor de madera y perillas , nos ayudaron  a que el mundo en que nos toco vivir  sea un poco mejor de cómo ustedes lo encontraron, al menos conmigo lo lograron y doy gracias a todos ustedes.



Esta historia no terminaría de otra manera, si no recordamos que si todos los buenos siguiéramos a nuestro amigo Jesús, el mundo seria un mejor lugar para vivir, y creo que la mejor frase que se te ocurrió y que dirías para cuando El regrese,  seria ¡Síganme Los Buenos!.... te aseguro Chespirito, por más equivocaciones y errores que hayas tenido en la vida,  tú vas a estar siempre entre los buenos por tanta alegría que repartiste, nosotros te escucharemos cantar nuevamente “Llámalo, Escúchalo, se llama amigo, llámalo, Escúchalo se llama Jesús",  Óyelo, escúchalo, está buscando amigos. Óyelo, escúchalo, te está buscando a ti",  y como al comienzo de mi historia esperaremos pacientes frente a nuestros viejos televisores  escuchando las ultimas palabras Si quieren saber como termina.........No dejen de ver nuestro próximo programa, por este mismo canal y a la misma hora.